Reflexión mañanera...

Estoy aquí en sábado, "día de guardar", sentado en frente del ordenador, haciendo las labores típicas del informático en épocas bajas, es decir, leer El Mundo, El País (hay que conocer al enemigo),...

Y veo una nota en el móvil. "Embajada de Cuba". Pues eso, que tengo una amiga cubana y le prometí buscarle la embajada de Cuba en Arabia. Encuentro la info y se me ocurre para mis adentros: "Pues mira, vamos a quedar para comer y le comento".

Ah! No, no es posible, porque vivo en un puto país lleno de salidos que lo único que piensan es que quedar con una tía significa follársela, por eso no nos podemos mezclar. Que digo yo... ¿es que cuando quedas con una tía es solo para tener sexo??? Y en caso de que así sea... ¿Qué malo tiene?? Por eso cuando un saudí (no me refiero a todos, solo a los que viven sumergidos en esta edad de piedra) se queda solo con una tía, lo único que sabe hacer es intentar tocarle una teta o algo así, porque claro, si la tía accede a quedar contigo es obviamente porque quiere sexo, no para hablar, hacer negocios,...

Así como un flash, me ha pasado toda mi vida por delante.

1.- De pequeñito me metieron en un colegio de curas. Por lo tanto nunca disfruté de la amenizada vida con compañeras de clase.
2.- Cuando terminé me fui a Madrid, a un internado militar. Vamos, que por no haber no había ni limpiadoras, teníamos a Chechu, el bedel. Un tipo majo, pero le faltaban un par de tetas para mi gusto.
3.- Posteriormente me matriculo en informática. Estimadas compañeras de clase, no es por desmereceros, pero... ni punto de comparación la facultad de, por ejemplo, farmacia, derecho, bellas artes, con la facultad de informática. En informática hay mujeres muy guapas, lo que digo es que el porcentaje es ínfimo.

Creo que la única vez en la que me relacioné (profesionalmente, me refiero) con mujeres, fue en parbulitos. Concretamente me acuerdo de una muchacha que se llamaba Lourdes, me encantaba salir a corretear detrás de ella al patio... o al menos eso creo, la verdad, no me acuerdo muy bien.

¡¡¡¡Y ahora, me encuentro aquí, en la "Meca" de la castidad!!!!

Francamente me la trae al fresco no relacionarme con mujeres, lo que me jode hasta lo más profundo de mi ser es que esta panda de gilipollas me lo prohiban.

Lo mejor de todo esto es que:

1.- Ahora mi antiguo colegio es mixto.
2.- En la facultad han metido hace unos años la licenciatura de teleco, plena de mujeres.
3.- Ahora en el ejército se permite el acceso a mujeres.

Seguro que dentro de un año, cuando yo ya no esté por estas tierras, se acaba la dictadura y construyen un sambódromo o algo por el estilo. Vamos, al menos eso es lo que pasó en España...

Por contradictorio que parezca, durante toda mi vida, fui afortunado (mujerilmente hablando).