30 abril 2008

Fin de semana con los implantadores

El pasado fin de semana (antes de cantarlo y bailarlo definitivamente), hice un poquito de anfitrión con los implantadores. Como no hay mucho que hacer pues nos fuimos a ver el Riad (que bonita eres) auténtico.

Jueves:

La península arábiga es una señora meseta de más de 2.200.000 Km^2 de piedra y grava. Así que cuando la ves por primera vez (a parte de decir: "que coño hago yo aquí"), te sientes un poco decepcionado, porque no tiene nada que ver con la idea de desierto de arena y dunas que estamos acostumbrados a ver en la tele.

Pero las dunas existen. Son muchas cadenas de arena móviles orientadas norte-sur y que cruzan el país desplazándose hacia el este. La cosa es que hay que buscarlas.

Así que nos alquilamos un 4x4 y encaramos la carretera de Meca...

...a unos 40 Km de Riad hay un desvío que te introduce en un típico desierto de dunas.

El sitio al que fuimos es conocido como la cascada de Jarrara (Kharrara). La pregunta es obvia: "¿Cascada?". Pues sí, aquí no llueve nunca, pero es como la española "que cuando besa, es que besa de verdad" (vamos, eso es lo que dice la canción...). Pues eso, que cuando llueve, toda esta zona se inunda y forma un lago con una cascada.

Es una zona de un contraste acojonante, por un lado tenemos un desierto de piedra desolador...

...y justo en frente te encuentras con una señora duna, de unos ciento y pico metros de alto y con una inclinación del 60%.

La hora de visita no fue muy acertada, vamos que a la una del mediodía, el sol pega bastante, así que la escalada de la duna se hace sufrida. El secreto: no tener ninguna prisa, subir muuuy despacito, así evitas desmayos y ser comido por los habitantes de las arenas (serpientes, escorpiones, escarabajos peloteros...)

Aquí podemos ver el proceso de adelantamiento



Subconsciente de Alfredo: "Cagüen el becario de los coj..".


El esfuerzo es muy grande, pero las vistas merecen la pena. Yo definiría la sensación como: estar en un reloj de arena gigante.


Seguro que a muchos se nos ha pasado por la cabeza si seríamos capaces de sobrevivir perdidos en el desierto. Yo lo confirmo, es completamente imposible, creo que antes de morirte de insolación o de sed, te mueres de desesperación. No te permite avanzar, quema, se te mete la arena en los ojos y no puedes ver, se te mete la arena en la nariz y no puedes respirar, el sol te ciega, el sudor no refresca, no existe ni una sombra, está lleno de moscas (de donde vendrán???!?!?!), no acaba nunca!!!! ¿Cómo lo harán los camellos?

Después de tanta hostilidad, nos fuimos a comer a un restaurante típico "El Najd".

No es de verdad, me refiero a que no es una casa tradicional de adobe, lo que han hecho es simular una, pero está muy conseguido.

Nos pusimos hasta las cejas de cabsa de camello, jumus, laban,...



Viernes

Al día siguiente, repetimos The Edge of the World

Como ya he dicho, el desierto no es un lugar para débiles. Que se lo digan a este pobre animalejo...

...o a este otro.
Esta vez fuimos solos, bueno, con la ayuda de un GPS, pero tengo que agregar que mi pericia y mi GPS interno nos ayudaron en gran medida a alcanzar el objetivo XD

Las fotos son un poco más de lo mismo...






Así que como ya sabíamos de que iba el tema, pues nos dedicamos a lo que más nos gusta. A hacer el cabra...



3 comentarios:

-=Tekena=- dijo...

ARENA, PIEDRAS, ARENA, PIEDRAS.... MAS ARENA....Riyadh, que bonita eres!!!

Anónimo dijo...

Qué alegria verte de nuevo!

tiestillo dijo...

Madre mia con los implantadores, que CABRONES, que bien se lo pasan coño! seguro que ya se están inventando la Fase 8... xDD

Oye, la cara que se os habría quedado si rompeis los todoterreno no me la querría haber perdido yo por nada del mundo. Como pa volverse a pata!

Un abrazo Oca!!